Hace horas, el Gobierno de Mauricio Macri cumplió su primer mes de gestión al frente del país.
La gobernabilidad por decreto (designaciones y modificación de leyes), la devaluación, la «demolición» de la Ley de Medios y la censura, conforman algunos de los condimentos de este nuevo Gobierno, que contribuyen a un malestar social generalizado.
En materia económica y empleo, tenemos también que citar la eliminación y baja a las retenciones, la quita de subsidios a servicios como la luz y el gas y los despidos masivos en el Estado, conjuntamente con el «protocolo» de control de la protesta social, que en la ciudad de La Plata culminó con varios heridos luego de una violenta represión policial a los trabajadores.
En ese sentido, desde su asunción el pasado 10 de diciembre, Mauricio Macri imprimió un drástico cambio de rumbo a la Argentina en el plano nacional e internacional, en claro contraste con los 12 años de Kirchnerismo.
En Hacienda y Finanzas, específicamente, se desreguló la inversión extranjera y el contado con liquidación. En Energía, se retrocedió en aspectos de soberanía.
Por todo ello, podemos concluir también, que Macri replica la estrategia de despidos que usó en la Ciudad de Buenos Aires.
Recordemos que en el año 2008, despidió a 2.300 empleados públicos con el «argumento» de que eran «ñoquis». Luego, una cautelar pedida por los gremios frenó la embestida, lo que valió la recusación del entonces Jefe de Gabinete a los jueces que la dictaron.
Pero, parece que lo mas importante es seguir haciendo hincapié en la «herencia K», sin tener en consideración las nefastas consecuencias de gobernar según el marketing político y para un grupo minoritario de la sociedad.
«Macri registró un récord difícil de superar en democracia: tiene el mas alto índice de medidas antipopulares de los últimos 30 años», fueron las palabras del periodista Hernán Brienza, en clara alusión a estos primeros 30 días de gestión macrista.
Es necesario recordar también, que, según su slogan de campaña durante las últimas elecciones, venían a pacificar, a reconciliar y unir a los argentinos. Sin embargo, están logrando todo lo contrario.
Una de las últimas frases de Prat-Gay, «arriesgar salarios a cambio de empleo», pone claramente en evidencia la postura del actual Gobierno.
Por lo cual, nos encontramos ante una fuerte ofensiva contra el empleo, el salario y también hacia la libertad de prensa y expresión, no olvidando la solidaridad y apoyo rotundo al periodista Víctor Hugo Morales quien, recientemente, fue censurado en Radio Continental.
Todo este cúmulo de evidencias, no hacen mas que movilizar a un gran número de la población, en cada plaza del país, a defender sus derechos, las instituciones y todas aquellas conquistas que se alcanzaron bajo la gestión de Néstor y Cristina Kirchner.
Dr. Hernán Alcántara
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