[AUDIO] Canal Abierto – Cooperativa la 770 – Miercoles 3 de marzo de 2021
El ex juez federal Carlos Rozanski, referencia por las condenas a los genocidas de la última dictadura, opinó sobre los desafíos del gobierno a la hora de proponer una reforma judicial y un control bicameral a la Justicia.
En el aire de Canal Abierto Radio, el ex magistrado caracterizó al poder judicial como “una institución históricamente aristocrática” y “con una estructura muy complicada”. Sin embargo, evaluó que es posible reformarla desde la voluntad política. “Lo que se hace erróneamente es que nos estamos acostumbrando demasiado a contar los porotos. Es decir, dejamos de proponer cosas importantes, interesantes, que podrían ser un beneficio para la comunidad, porque no tenemos los votos suficientes”. Pero “cuando se proponen medidas de cambio, favorables a la comunidad, no hay que especular”.
El ex juez remarcó que la oposición con la que se quiere consensuar, “son los que te ponen mortajas en las puertas de la casa de gobierno”. Asimismo, en la Corte Suprema de Justicia, hay tres jueces que votaron el 2×1 a los genocidas y dos que entraron “por la ventana” gracias a la intervención del ex presidente Mauricio Macri. Por lo tanto, ampliarla es “una cuestión absolutamente democrática y legal”.
Juicios por Jurado.
En este aspecto, Rozanski expresó desconfianza, y ejemplificó con el caso de Flavia Saganías, la mujer cuya hija fue abusada por su padre, realizó la denuncia y al no tener respuesta, lo escrachó en redes sociales. A partir de allí, su madre y su hermano viajaron desde Buenos Aires a Córdoba, atacaron al hombre y le quemaron la casa. Ahora, tanto Flavia como su madre y su hermano están presos, con 23 años de prisión, por condena del Tribunal Popular de Córdoba.
¿Reforma judicial feminista?
En cuanto a los reclamos del movimiento de mujeres y disidencias por las demoras, la falta de acción y control en denuncias en casos de violencia patriarcal, el magistrado explicó que “cuando el Estado tiene noticia de ese tipo de amenaza y riesgos, puede evitar la totalidad de los femicidios y de los que se concretaron no se evitó ninguno”.
A la vez, comentó que a pesar de que la Ley Micaela es “extraordinaria”, por el momento “es un curso, no te va a cambiar una mirada patriarcal que lleva siglos, es una cuestión mucho más profunda el patriarcado y requiere soluciones mucho más profundas”.
En cuanto a la querella criminal contra los tomadores de deuda pública, Rozanski manifestó que “desde lo anímico es una alegría, una caricia para el alma, es una evolución en el discurso oficial”. Y agregó que en este caso “hay que tener en cuenta que el endeudamiento es parte de un plan que llevó adelante el gobierno de Mauricio Macri” y que la perspectiva es que los culpables paguen sus crímenes.