Grupos armados nigerianos liberaron a decenas de estudiantes secuestrados este mes en el estado de Zamfara, en el noroeste del país, según una fuente gubernamental local y un video que muestra a altos cargos estatales con los niños.
La liberación de los estudiantes de la escuela Kaya tuvo lugar luego de que el Ejército lanzase una operación contra las bandas armadas en el estado y las autoridades locales bloqueasen las telecomunicaciones en Zamfara para obstaculizar sus comunicaciones.
Más de 70 estudiantes y algunos profesores fueron secuestrados en Kaya el 1 de septiembre, en el último de una serie de secuestros masivos en escuelas y colegios por parte de hombres armados, conocidos localmente como «bandidos».
«El domingo por la noche fueron liberados 75 rehenes de la escuela secundaria gubernamental de Kaya», dijo la fuente del gobierno local, informó la agencia de noticias AFP.
«Parecían en buen estado de salud e ilesos», añadió.
Por otra parte, un video difundido por la oficina del gobernador del estado de Zamfara, Bello Matawalle, lo mostraba saludando por la noche a autobuses llenos de estudiantes y preguntándoles si habían resultado heridos.
Los grupos criminales armados se convirtieron en una amenaza creciente en el noroeste y el centro de Nigeria, donde asaltan aldeas, roban ganado y desde hace varios meses se dedican a los secuestros masivos de estudiantes, de cualquier edad.
Después de pasar semanas o meses en cautiverio, las víctimas suelen ser liberadas tras negociaciones con las autoridades locales, aunque estas acostumbran a negar que se hayan pagado rescates.
Se calcula que desde diciembre pasado se secuestraron unos 1.000 estudiantes y todavía hay decenas de ellos desaparecidos.
Los secuestros o intentos de secuestro se incrementaron desde fines del año pasado, cuando al menos 344 estudiantes de entre 11 y 20 años fueron liberados y más de 400 lograron escapar tras permanecer una semana bajo el control de combatientes islamistas de Boko Haram en el estado de Katsina.
Desde diciembre tomaron como objetivo las escuelas y más de mil estudiantes fueron tomados como rehenes este año.
La mayoría de esos estudiantes fueron liberados tras las negociaciones y algunos escaparon, pero decenas de ellos siguen retenidos por sus captores en escondites.
En tanto, el fin de semana, en una base militar también ubicada en el estado de Zamfara, hombres armados atacaron a 12 efectivos de las fuerzas de seguridad nigerianas.
Las telecomunicaciones fueron cortadas en Zamfara y en zonas del estado vecino de Katsina para interrumpir los contactos entre los bandidos respecto a los movimientos del Ejército.
«Los agresores irrumpieron en la base sobre las 10,30 hora local y enfrentaron a las tropas en un intenso tiroteo», indicó una fuente de seguridad.
«Sometieron a las tropas, matando a doce efectivos. De los cuales nueve eran marinos, uno soldado y dos policías», afirmó.
La base de Mutumji, en el distrito de Dansadau, distante unos 80 kilómetros de la capital del estado, Gusau, es un lugar clave desde el punto de vista logístico para la lucha del Ejército contra los bandidos de esta región.
Los yihadistas del noroeste de Nigeria atacan con frecuencia bases militares en el estado de Borno, núcleo de una insurgencia que dura ya 12 años y que ha provocado la muerte de unas 40.000 personas.