[AUDIO] Canal Abierto – Cooperativa la 770 – Jueves 16 de julio de 2021
Juan Carlos Suárez, ingeniero en la Comisión Nacional de Energía Atómica y residente en Argentina hace 20 años, explicó cómo impacta el bloqueo económico que se extiende desde hace mas de 60 años en Cuba al que, durante la pandemia, se le sumó la escasez, modificaciones en el tipo de cambio y apagones que derivaron en las protestas del pasado domingo 11 de julio.
“Tiene una cosa multidimensional, pero la idea principal de las protestas tiene que ver fundamentalmente con el bloqueo, por la intención de los Estados Unidos de apoderarse de Cuba, que la tuvieron en su momento hasta la llegada de los barbudos a La Habana”, explicó el científico.
Antes de la Revolución, “Cuba fue una neo colonia, prácticamente dirigida desde el norte, como lo podemos ver en la actualidad con Puerto Rico”, rememoró.
Las empresas norteamericanas no son las únicas que no pueden vender a Cuba: hay sanciones económicas y boicot para los mercados que tomen ese comercio en todo el mundo. Aún así, algunas empresas y el propio gobierno han logrado establecer comercios para sortear esas dificultades.
El ingeniero remarcó que no fueron miles ni millones de personas las que se sumaron a las manifestaciones, pero que sí hay un agobio muy grande de la población. Las protestas fueron genuinas, aclara, pero “en general estaba creada toda una operación de que si algo de esto sucediera, si apareciera una protesta genuina, de incomodidad y de inconformidad por la situación que está viviendo Cuba, acto seguido iba a salir toda una operación de otras protestas alrededor de la isla”.
Asimismo, explicó otros elementos que se suman a la paralización económica, como la rotura de una Central Termoeléctrica unas semanas antes de las protestas. La misma tiene 300 mega watts de potencia y durante el mantenimiento se le estaban agregando 200 mega watts más. “Quiere decir que de repente salieron del sistema eléctrico nacional 500 mega watts y, por supuesto, eso provocó que aparecieran los famosos apagones que hacían 30 años no se veían en Cuba”, explicó Suárez,
Por otro lado, a partir del primero de Enero de este año hubo una unificación de la moneda, entre el Peso Cubano, que estaba en un valor de 24 a 1 con el dólar, con el que se pagaban salarios, y el Peso de cambio, de un valor de 1 a 1 con el dólar, más utilizado en el sector turístico. Esto trajo aparejado pérdidas grandes y dificultades en el comercio externo y en el mercado interno.
Suárez subrayó que hay que recordar y remarcar que “no es una Cuba normal, es una Cuba bloqueada, si fuera un país donde se puede comercializar normalmente como cualquier otro país del planeta, podría achacarle toda la irresponsabilidad a un Gobierno. Pero este no es el caso”.