Mauricio Macri arribó a París el pasado viernes sin importar que Argentina atraviesa el peor momento de la pandemia, con multiplicación de contagios y fallecidos, y dejando de lado el escándalo que implica a su secretario Darío Nieto por los préstamos a Vicentín. Con motivo de llevar adelante acciones en la Fundación FIFA, el ex presidente se mantendrá aislado en Francia para después viajar a Suiza.
El ex presidente y líder de la oposición se alojó en un hotel de lujo pero ante las críticas recibidas por la ostentación de su alojamiento, decidió instalarse en el departamento de unos amigos, ubicado cerca del Boulevard Saint-Germain, donde se lo vio paseando y cenando en una terraza vecina al célebre café Les Deux Magots.
Sin embargo, la comunidad argentina que reside en París se manifestó contra la llegada de Mauricio Macri. Frente a la Torre Eiffel, se observaron pancartas con las fotos de Santiago Maldonado, Milagro Sala y banderas de Argentina y otras naciones latinoamericanas.
Además, se convocó a un “tuitazo” en las redes sociales de apoyo a la manifestación llevada a cabo en Francia.